AL PRINCIPIO
LA NECESIDAD DE DIFERENCIARSE
El Partido de la Revolución Democrática nació para combatir el fraude electoral, su nacimiento inició el traslado de una gran fuerza de activistas a la ruta de las urnas, después de que la exitosa campaña del ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas persuadiera a muchos escépticos de que sí se puede.
Los primeros asesinados fueron Gil y Ovando, los operadores electorales a cargo de las tareas más delicadas de la jornada electoral, que fueron abatidos a balazos horas antes del 5 de julio de 1988. Salinas fue con la derecha amable y concertador, y con la izquierda, feroz enemigo, su mandato significó la eliminación física de más de 600 miembros del PRD oficialmente fundado el 5 de mayo de 1989.
El PAN nace en 1939, integrado por los que resisten el cumplimiento de las demandas populares que la revolución mexicana ofreció satisfacer, y que encuentran sustento constitucional en los artículos tercero, veintisiete y ciento veintitrés de nuestra carta magna.
La ascendencia en su conformación del clero conservador, los grandes propietarios rurales, y una porción pequeña de la clase urbana, neutralizan la vocación por lo social aunque abanderan un principio de suyo civilizador: el de la legalidad
QUE SÍ SOMOS IGUALES, DICE LA GENTE
Ambos partidos se erigieron en opciones viables para transitar a la democracia, pero después de doce años de alternancia algo falló.
El PRI se coloca como el mejor posicionado para la contienda del 2012, sin erradicar los vicios que lo condujeron a la derrota. Las dirigencias del PAN y del PRD pactan alianzas electorales en el presente año con el explícito propósito de evitar su regreso.
Pero al no involucrar a las bases partidarias en la decisión, el PRI capitaliza a su favor el lógico repudio a las alianzas sin principios, ni fundamentos programáticos, de las bases de ambos partidos, que no atinan cómo transitar de la hostilidad a la camaradería mutua sólo porque sus respectivas dirigencias se entienden muy bien en sus encuentros en los mejores restaurantes de la ciudad de México.
Ser alternativa política respecto a otros significa que se es distinto a esos otros, en ese sentido, el PRD y PAN tienen una gran oportunidad de diferenciarse del partido al que no quieren de regreso.
CAPACIDAD DE RECTIFICACIÓN A PRUEBA
Una vez confirmada la sesión privada en donde por 12 votos contra once se aprueba un bono de dos millones de pesos para cada diputado, y que se sabe con certeza que algunos recibieron un significativo porcentaje de esa cantidad antes de solicitar licencia, es momento de asumir un compromiso real con la democracia.
Las sesiones privadas no tienen razón de ser cuando se trata de comparecencias de funcionarios, ni cuando abordan temas como el que nos ocupa. El impacto causado por las revelaciones del ex secretario de finanzas Jorge Miranda debe servir de oportunidad para prohibir semejante aberración
El PRI reacciona sin el mínimo interés en las transgresiones éticas de sus miembros y en contra del mensajero, olvidando que en Zacatecas asume un discurso de pretendida superioridad moral incompatible con el comportamiento de su fracción legislativa, que tantos y tantos servicios prestó al gobierno que hoy denuncia.
No obstante, me parece inconsecuente cargarle todo el costo político al PRI basados en el hecho de que sus votos fueron a favor de auto asignarse el exorbitante bono. Mientras no sepamos si los once que votaron en contra y los siete que no asistieron lo cobrarán al terminar la legislatura.
Cabe preguntarse cómo sustentaran lo que a los suplentes corresponde, ¿los suplentes de los que no cobraron un centavo están obligados a compartir el bono con el ex titular?, los suplentes de los que cobraron “a lo chino” ¿tienen derecho a reclamar un bono igual? Que se sepa, no hay reglas que establezcan proporcionalidad o algo al respecto.
Ningún partido que se diga democrático y comprometido con la ciudadanía puede oponerse a que se haga público lo que es de interés público siendo así nadie puede objetar la publicación de los nombres que votaron a favor y en contra del tristemente célebre bono de los diputados ni la relación de los pagos por ese concepto.
AL ÚLTIMO
Las dirigencias partidarias suelen batallar con sus miembros que ocupan puestos de elección popular hasta para que paguen sus cuotas, por eso es difícil esperar de ellas la fuerza política suficiente como para conminar a sus diputados a que donen el bono millonario a una buena causa, pero en la medida en que se transparente todo lo relacionado con este asunto, la sociedad estará en condiciones de impulsar procesos correctivos sin depender de la capacidad de autocrítica de la clase política.
Nos encontramos el lunes en el recreo
