sábado, 23 de mayo de 2009

México S.A.

Carlos Fernández-Vega
La Jornada, 23 de mayo de 2009.

  • Aumenta el gobierno el gasto corriente
  • Reclama más sacrificio social

Al gobierno federal se le desploma el ingreso, estima un hoyo fiscal cercano a 300 mil millones de pesos en 2009, carece de recursos para estimular el crecimiento económico, no tiene con qué generar empleo ni para atemperar la sacudida, pero, eso sí, su gasto corriente crece a un paso envidiable: casi 19 por ciento en el primer trimestre de 2009, es decir que en pleno deterioro de la economía alcanza proporciones históricas, y justo cuando argumenta que no queda de otra que ir tras una reforma tributaria.

Pues bien, la mayor parte de las erogaciones gubernamentales corresponde a gasto corriente –no debidamente transparentado ni necesariamente destinado a cubrir únicamente las necesidades básicas de los servidores públicos–, y aún dentro del mismo a la parte clasificada como de otros, es decir aquel que no tiene relación con los salarios o la operación de las dependencias oficiales. “El análisis del presupuesto permite afirmar que su ejercicio es ineficiente. Como consecuencia de lo anterior es prioritario que se genere una cultura de evaluación del impacto que tiene cada peso que el gobierno gasta, a fin de esclarecer cuál es el beneficio social o el crecimiento económico alcanzado.

Mientras ello no ocurra, aumentar la recaudación fiscal no necesariamente solucionará el problema de las finanzas públicas, y la razón es sencilla: en los últimos años se recaudaron ingresos superiores a los presupuestados sin el mayor impacto económico o social. Por tanto el gobierno debe primero hacer su tarea de forma interna antes de reclamar un sacrificio social mayor, como la apunta el ITESM, campus estado de México, en su recientes informe sobre las perspectivas económicas 2009 (México un país en recesión), institución que nos ofrece los siguientes ejemplos representativos de prestaciones a funcionarios, no sin advertir que antes de buscar elevar las tasas impositivas en el consumo o la renta, el gobierno federal debería resolver su problema administrativo, ya que en coyunturas como las actuales los gastos corrientes que no resuelven los problemas de crecimiento económico, distribución de la riqueza y equidad, simplemente se convierten en un lastre para la sociedad.

Presidencia de la República: en el primer trimestre de 2009 se comió 97.7 millones de pesos, 67 por ciento de ellos a otras prestaciones. En la Secretaría de Gobernación el seguro de separación individualizado es el principal componente de gasto, mientras que en la de Relaciones Exteriores de los 45.2 millones de prestaciones, 10.4 fueron ayudas para el pasaje, 1.99 en apoyo para la renta de vivienda, 2.5 como compensación para capacitación y desarrollo, 1.5 como estímulo por antigüedad, 1.6 de horas extra, 15.6 del seguro de vida individualizado, 4.6 del seguro de vida institucional y 2.6 de otras prestaciones, todo ello ejercido por el sector central de la institución.

Secretaría de Hacienda y Crédito Público: en su sector central, 142.7 millones en prestaciones, de los cuales 31 fueron aguinaldos o gratificaciones de fin de año, 6 a estímulos por puntualidad o productividad, 1.7 por nota buena, 40.9 por Seguro de Separación Individualizado y 20.4 por otras prestaciones. El SAT (que trae apergollados a los causantes cautivos) ejerció 487.1 millones en este renglón, de los que 2.8 fueron ayuda para servicios, 7.8 por días económicos, 4.4 por quinquenios, 113.7 por Seguro de Retiro Individualizado. 147 por aguinaldo o gratificación de fin de año, 27.3 de seguro de gastos médicos mayores (aparte el ISSSTE), 10.4 de ayuda de despensa y 2.2 de otras prestaciones. En Bancomext (donde se cocina un nuevo recorte de personal, porque no hay dinero): 73 millones, de los que 25.8 fueron a otras prestaciones, 6.3 a vales de despensa, 3 de prima vacacional y dominical, 10.9 aguinaldo o gratificación de fin de año, 8.4 estímulo por antigüedad. La Casa de Moneda de México gastó 35.4 millones y 42 Financiera Rural, incluido el subsidio por costo de vida cara. Por si fuera poco, en Lotería Nacional (aparte el gasto en publicidad para las campañas panistas), 70.8 millones.

El sector central de la Sagarpa ejerció 197.6 millones en prestaciones a funcionarios: 55 de aguinaldo o prima de fin de año, 2.3 de ayuda para transporte, 5 de ayuda de despensa, 1.9 por laborar en zonas riesgosas o insalubres, 9.2 por puntualidad o productividad, 3.9 por quinquenios, 20.7 de seguro de separación individualizado y 24.9 de otras prestaciones. En la SCT, el sector central gastó 47.8 millones, de los que 35 fueron a otras prestaciones. Capufe erogó 156.8 millones, el Servicio Postal Mexicano 259.4 millones y Telecomunicaciones de México 179 millones.

El sector central de la SEP se comió 3 mil 735 millones de pesos, de los que 907 se destinaron a gratificación de fin de año o aguinaldos, 17.2 en apoyo a la docencia, 143.3 en apoyo a despensa, 6 en asignación a docencia genérica, 2.9 en apoyo para servicios, 28.2 por actuación y productividad, mil 178 por antigüedad, 242 por puntualidad o productividad, 62 para instrumentos o materiales de trabajo, 60.4 de prestaciones de retiro, 260.8 en prestaciones de prima vacacional o dominical, 21.9 de servicios co-curriculares y 311.8 por otras prestaciones. Además, Conaculta 75.3 millones, la mayor parte para otras prestaciones. El INAH repartió 185.4 millones y el INBA 181.5. Y por la misma senda la Secretaría del Trabajo (84.8 millones), Comisión Nacional del Agua (187.8), CFE (8 mil 576), Instituto Mexicano del Petróleo (400.6), Luz y Fuerza del Centro (113.2) y Pemex, cuyos gastos por prestaciones son verdaderamente muy elevados.

Pero no hay dinero.

Las rebanadas del pastel

Y en la tienda de enfrente, sacan la tijera para recortar el gasto productivo: de enero a marzo de 2009 se reportó un subejercicio de 7 mil 500 millones de pesos, siendo los ramos de Comunicaciones y Transportes (3 mil 300 millones), Medio Ambiente y Recursos Naturales (947), Hacienda y Crédito Público (892), Desarrollo Social (492), Turismo (243) y Economía (196) los que mayor problema presentaron”, en el entendido que son dineros públicos que, se supone, forman parte de los programas de apoyo a la economía y el bienestar social anunciados por el inquilino de Los Pinos como parte de su exitosa política anti cíclica. Felicidades: día tras día mejora la continuidad.