NO FUE DEBATE, FUE MASACRE
No fue un intelectual Obradorista, tampoco un militante de la izquierda radical, fue nada más y nada menos que el titular de la Auditoría Superior de la Federación, Arturo González de Aragón, quien demostró en su participación que las ganancias de PEMEX sirvieron durante el gobierno de Fox, para llenar los huecos financieros cuando el gobierno les devuelve sus impuestos a los grandes consorcios, uno de los cuales dijo, pagó setenta y cuatro pesos en el año 2004 de ISR y sesenta y nueve pesos de IVA.
El Auditor superior de la Federación asombró a todos los presentes en el debate en el Senado cuando reveló que durante el sexenio de Fox se devolvieron a las grandes empresas seiscientos ochenta mil millones de pesos, quedando claro que lo que a los grandes tiburones se les regresa, a PEMEX se le quita.
Otro de los ponentes invitados, Octavio Romero, citó casos concretos de operaciones corruptas en el sexenio de Fox y en la época en que fungió como Secretario de Energía Felipe Calderón. Puso el caso del contrato de una empresa española llamada Dragados para la reconfiguración de la refinería de Minatitlán, Veracruz, que tiene un retraso de más de dos años y cuyos costos originales ya se duplicaron sin que a nadie le hayan fincado responsabilidades. Otro ejemplo: una empresa noruega rentó una plataforma petrolera a cada una de tres empresas (Petrobrás América, Petrobrás Brasil y PEMEX) y sin que nadie diga por qué a Petróleos Mexicanos le dieron la plataforma más pequeña y a un precio trescientos millones de dólares más caro, y así continuó con un rosario de ejemplos.
Las exposiciones de ambos fueron de tal contundencia, que los asistentes al foro del Senado aplaudieron como nunca antes las denuncias sobre todo cuando los partidarios de la propuesta calderonista, al reclamar que por qué no se denunciaba ante las autoridades competentes lo que ahí se decía, recibieron la demoledora respuesta del titular de la Auditoría Superior cuando dijo que esas denuncias están en la Procuraduría General de la República y en la Secretaría de la Función Pública durmiendo el sueño de los justos.
Ante el histórico fracaso de la campaña de radio, televisión y prensa escrita alineada al poder económico y político que no ha podido disminuir el rechazo social generalizado a la propuesta calderonista, se advierten signos interesantes: el propio Felipe Calderón, declara en Salamanca que los mexicanos debemos ponernos de acuerdo en una reforma petrolera que reúna los diferentes puntos de vista. Esto significa la aceptación de que su propuesta no podrá pasar en los términos en los que la planteó, a eso hay que agregarle la realización de contactos entre la dirigencia de los tres partidos políticos más grande de la vida nacional.
Desde la experiencia histórica, tenemos derecho a permanecer vigilantes y no irnos con ninguna finta política tendiente a imponernos "la misma gata pero revolcada" y asestarnos un golpe del tamaño del FOBAPROA.
Para los que aún son muy jóvenes es pertinente recordar que la operación FOBAPROA fue envuelta de "diálogo", en medio de loas a la "madurez".
Todo esto lo traemos a colación para explicar por qué al mismo tiempo que desarrollamos nuestro esfuerzo con base en argumentos y razones solidamente fundadas, convocamos a un ejercicio de sana suspicacia ciudadana.
Nuestro pueblo se refiere a situaciones como esta cuando expresa: "la mula no era arisca, la hicieron".
Zacatecas, Zac. 18 de julio de 2008